Una de las cuestiones que hizo desafiar Lutero al papado romanista fue su predicación en latín, puesto que si nadie la entiende; ¿Que significado o beneficio crea en las personas que la escuchan? Ninguno.
Si estudias teología en una universidad contemporánea te harán saber y entender más de un centenar de palabras que solo ellos saben sus significados, pero para el pueblo le es imposible saber todas estas palabras y si ellos no dan su significado, sinceramente se están predicando a ellos mismos, y pondré algunas a continuación:
Minimalistas, pretéritas, vernácula, gematría, premilenialista, amilenialista, dispensacionalista, sensacionista, teofanía, sionismo, catecumenista, liturgia, paracleto, sínodo, cónclave, maniqueísmo, apologista, patristico, dogmatismo, relativista, subjetivista, empirismo… y estas solamente son unas cuantas.
Según he visto que estos nuevos teólogos recién salidos de la incubadora expresan en cada frase una palabra que solo ellos la entienden y si no expresan sus significados, mejor ni hablen, pues esto es como:
1 Corintios 14: 27 SI ALGUNO HABLA EN LENGUA EXTRAÑA, SEA ESTO POR DOS, A LO MAS TRES, Y POR TURNO, Y UNO INTERPRETE.
Lo que no es entendible no posee lógica, aunque estemos hablando el mismo idioma, ya que estas palabras aunque estén dentro de la real academia de la lengua, no son habladas, ni conocidas por el pueblo, así que el consejo que os doy es que habléis el idioma del pueblo, si queréis daros a conocer o vuestras teologías, porque si son vuestras teologías debéis de hacerlo, pero si son vuestras famas no importa lo que hagáis porque nada tiene que ver con el reino de Dios.
Esto tiene mucho parecido al latinoamericano que se va seis meses a EEUU y de regreso a su tierra ya no sabe hablar el castellano, debido a que por tres años estuvisteis estudiando teología y ya se os olvidó el lenguaje del pueblo.
Desde el nacimiento de la iglesia romanista hasta el año 1969 siempre se predicó en latín, siendo inútil dicha predicación, porque nadie la entendió, y la pregunta del millón, es ¿Por qué hacían esto? Lógicamente para que nadie supiese de las escrituras, y si estos nuevos teólogos intercalan en cada frase una palabra que solo ellos saben su significado ¿para quién predican? Lógicamente para ellos o para su ego.
Siempre se entendió el evangelio bajo un comunicado simple y estas palabras en su mayoría (no todas) se han introducido en este último siglo, donde el pueblo no logra entender las predicaciones de estos por la cantidad de palabras desconocidas que introducen, y mi pregunta es:
¿Qué tan importante es introducir tantas palabras desconocidas? ¿tenemos que aprenderlas hoy en día dichas palabras para saber teología? ¿quién está fallando el expositor o el oyente?
He hecho mención de este tema, porque alguien cercano a mi, cada dos por tres me dice que significa esta palabra o frase y por lo consecuente me toca ir a un diccionario reciente para discernir el significado de la frase por dicha palabra.
Hermanos, el evangelio mientras más sencillo sea su comunicado, es mejor puesto que el receptor es el beneficiado y el mensaje debe de ser lo más sencillo y simple para el.
Y aquellos que en sus comunicados expresan grandes palabras desconocidas y unas detrás de otras yo lo único que veo ahí es un gran ego, diciendo al mundo YO SI SE DE ESTO, MIREN COMO ME EXPRESO, y lo único que hay detrás de estas personas es alguien que aún no se ha despojado y es muy grande, donde Cristo no ha hecho aún la obra por la majestuosidad de dicha persona.
El mensaje del evangelio debe de ser accesible al mundo entero bajo expresiones sencillas, claras, coherentes y accesibles a cada ciudadano de este mundo, independientemente del estado social, cultural, educativo o económico que posea el que exponga dicho mensaje, puesto que al que lo recibe debe de facilitársele lo máximo posible lo que se le intente de expresar y exponer, puesto que la finalidad del mensaje es que el oyente salga beneficiado con dicho mensaje, ¿y si no lo entiende por tantas palabras desconocidas, que beneficio produce el mensaje? NINGUNO.
Proverbios 10: 14 LA MANO NEGLIGENTE EMPOBRECE; MAS LA MANO DE LOS DILIGENTES ENRIQUECE.
Hacer las cosas con diligencia trae enriquecimiento al reino de Dios, pero la del negligente, la frena, porque nunca avanza.
Si un pastor predica y el oyente no la entiende, dicho pastor no está extendiendo el reino de Dios, sino obstaculizándolo.
Hechos 8: 30, 31 ACUDIENDO FELIPE, LE OYO QUE LEIA AL PROFETA ISAIAS, Y DIJO: PERO ¿ENTIENDES LO QUE LEES?
EL DIJO: ¿Y COMO PODRE SI ALGUIEN NO ME ENSEÑARE? Y ROGO A FELIPE QUE SUBIESE Y SE SENTARA CON EL
Os ruego a los nuevos teólogos que presenteis el evangelio con la mayor sencillez posible, por amor a aquellos menos conocimientos universitarios, y este tema solo es una exortación, pues en ningún momento hago mención de alguna herejía.
Y otro tema muy importante que he visto mas de mil veces, es el gran pleito sobre cualquier doctrina que llevais a cabo y es que aún no entendieron que el evangelio se creo para salvación y no discusión por lo cual entiendo que la biblia por causa de tanto y tanto debate bblicola estais convirtiendo la biblia en una carniceria espiritual donde el amor y el menesterosa son los dos sufrientes de dicha acción.
Por lo que aconsejo que cada quién presente su creencia en el evangelio, pero no lo pleiteen publicamente, porque crea mal testimonio ante el mundo, y si fuera necesario hacer un nuevo concilio, haganlo
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